Un amigo lector desde Italia me envía la siguiente imagen para su publicación en el blog. Realizadas las comprobaciones previas, para evitar que nos metan gato por liebre, la subo al blog para vuestro disfrute.
Paso ahora a comentaros los detalles. Subrayo el exceso de carmín en los labios de esta bella esposa italiana. Tiene su explicación. A nuestro amigo le gusta que ella remarque ese detalle para quedar mejor en la imagen y que el carmín inunde el capullón del corneador consiguiendo una plasticidad cromática en contraste con la lefa del corneador. Además, después de disfrutar la bella carnosidad de los labios de la italiana, sin duda el carmín es un elemento indispensable para el momento tragarrabos.
“Mi mujer con otro hombre”. Así es como el cornudo amigo lector ha titulado esta composición de imágenes.
Paso ahora a comentaros los detalles. Subrayo el exceso de carmín en los labios de esta bella esposa italiana. Tiene su explicación. A nuestro amigo le gusta que ella remarque ese detalle para quedar mejor en la imagen y que el carmín inunde el capullón del corneador consiguiendo una plasticidad cromática en contraste con la lefa del corneador. Además, después de disfrutar la bella carnosidad de los labios de la italiana, sin duda el carmín es un elemento indispensable para el momento tragarrabos.
Otro detalle es el choque entre el capullón inhiesto del corneador y la parte de debajo de la lengua, formando un dúo de una plasticidad gráfica singular.
Y por último, destacar la cubana de esos dos tetones de pezón extendido y centrado que forman el marco idóneo para la lefada del amigo.
En una sola palabra: maravillosa. Pero, maravillosa por la belleza de esta madura mujer italiana y también porque la imagen trasmite el emputecimiento sereno y activo de ella.
Por último, agradeceros a todos y todas que con vuestros comentarios enriquecéis el contenido del blog. Vuestras opiniones y peticiones a través de los comentarios son sagradas. Ahora bien, recibo infinidad de comentarios con números de teléfonos o whatsapp, os tengo que recordar que no puedo publicar teléfonos y menos cuando os identificáis de manera anónima. Si podéis poner vuestras direcciones mail pero teléfonos, NO.
También recordaros que tenéis el correo del blog, corneador.toro@gmail a través del cual podéis escribirme con vuestras dudas o me podéis plantear si queréis salir y contactar con otros lectores/as del blog o con los protagonistas de las entradas.
Y eso es todo amigos, bueno no. Os dejo a continuación un enlace a una entrada antigua que también protagonizan unos amigos italianos. Es un placer comprobar que este humilde blog va cruzando fronteras.
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