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@CornudoFeliz, mi esposa suele decirme: “Mira como me coje, el sí sabe cómo, qué rico, su verga está riquísima, la tiene grande no como la tuya”

En el mes de marzo de 2011, vía twitter, tuve la ocasión de contactar con @CornudoFeliz. Muy pronto comprobé que se trataba de un cornudo consentidor auténtico y no otro de los muchos cantamañanas que circulan por la red con la fantasía de ser cabrones pero que no consiguen dar el paso y fantasean con identidades falsas y experiencias inventadas.

Después de conocer su historia le propuse hacerle una entrevista para el blog y que nos contara en primera persona su experiencia. La entrevista ha sido la más vista y leída en 2011 por los lectores del blog de corneadores, cornudos y esposas abiertas. Seguro que los lectores habituales recordáis su desgarrador testimonio: “Es mi esposa, pero también tu amante… atiéndela y disfrútala, tienen mi permiso. He aquí, un cornudo consentidor”.

Que lo que dice @CornudoFeliz es de interés para todos los que integramos esta comunidad es que alguna de sus reflexiones cornudas las incorporé directamente en el decálogo de este año: “10 Consejos para sacar de tu mujer la zorra que lleva dentro y para que tú puedas disfrutar del placer de ser un cornudo consentidor”. Vosotros, queridos lectores, habéis convertido este decálogo en una referencia para las esposas abiertas. De hecho, mucho de los comentarios, de las aclaraciones y dudas que habéis planteado a estos consejos me permitirán, próximamente, publicar el decálogo 2012, actualizado y revisado.

Por todo ello acabamos el año con una entrada que nuestro amigo @CornudoFeliz. Nos cuenta como conocieron a Ricardo, todo un corneador, no sabemos quién está más contento de tener a este macho como amante, si la esposa de @CornudoFeliz o el propio @CornudoFeliz. Podéis sacar vuestras propias conclusiones.



He descuidado un poco a Twitter, la carga de trabajo ha sido intensa pero espero compensar un poco mi ausencia con esta aportación ya que no sólo me gusta “contribuir a la causa” sino que escribir también me relaja (sobre todo en estos días) y como dicen por ahí: recordar es vivir.

Así que con la invitación de mi amigo @ToroCorneador, mando esta contribución a su blog y espero pueda ser de utilidad para todos aquellos cornudos consentidos y corneadores –en activo o que quieran serlo- y en general para todos aquellos cachondos que quieran echarle un vistazo a este estilo de vida.


Crónicas del @CornudoFeliz

Han sido días de jornadas interminables… viajes, reuniones, videoconferencias de madrugada y demás cuestiones de trabajo. Parecía que por fin mi esposa y yo tendríamos la oportunidad de salir juntos. El próximo viernes habíamos contemplado asistir a la última función de una obra de teatro que tiene muchas ganas de ver; pero como suele pasar en negociaciones de fin año, un imprevisto ha cambiado los planes. Pensé que mi esposa se molestaría al recibir la “mala” noticia ya que estaba muy entusiasmada, sin embargo, su respuesta fue indiferente. 

-Ah sí, ya me lo imaginaba… no te preocupes, voy con Ricardo-

De hecho, parecía estar aliviada de ir con Ricardo y no conmigo. En situaciones como esta es cuando viene muy bien tener a corneadores de confianza. Según me comentó, había puesto sobre aviso a varios de sus amantes por si yo le llegaba a cancelar y acertó en hacerlo. Decidió ir con Ricardo que es uno de sus amantes predilectos pero también uno de tres corneadores de confianza que tengo. Corneadores espontáneos de una sola noche van y vienen, pero los de confianza actualmente sólo son tres.



A Ricardo lo conoció hace tiempo en lo que mi esposa y yo llamamos “noche de miradas”, que consiste en llevarla a lugares públicos vestida muy sexy para atraer miradas y yo seguirla de lejos para poder excitarme viendo como los demás la observan con lujuria. Cuando Ricardo se le acercó a hacerle plática mientras mi esposa hojeaba algunas revistas en Sanborns, era evidente que hubo atracción y que Ricardo pudo sacarle una buena conversación. Procedieron a seguir charlando con un café en el restaurante del establecimiento y yo tomé asiento en una mesa a cierta distancia. Aunque no podía escuchar claramente lo que platicaban, las risas y las expresiones en sus rostros indicaban una buena química. Algunos minutos después, mi esposa le confesó todo: que era casada pero que a su marido le excitaba verla con otros y que andaba en busca de nuevos amantes para dicha aventura; después de cierta sorpresa y lleno de curiosidad, Ricardo le pidió más detalles. Mi esposa le expuso nuestra situación y le dijo que él había sido de su agrado y que si seguía interesado en pasarla bien con ella, dependía de él. Ricardo en un principio dudó de la situación y al parecer no estaba muy convencido pero a final de cuentas intercambiaron número telefónico y quedó de hablarle en unos días. Mi esposa pensó que no volveríamos a saber de él. 

–Es una lástima, es sumamente agradable y es guapo- comentó mi esposa en aquel entonces. 


Y suele suceder, que no todos los corneadores potenciales toman la proposición de la mejor manera. En el momento que mi esposa les dice de nuestro “vivant” sexual, muchos piensan que hay gato encerrado, otros que es algo desagradable, les da miedo o de plano sus intenciones con mi esposa son legítimas y hasta le proponen sacarla de “esta vida” (Ja Ja Ja!), pero es bueno para nosotros saber que tienen dudas y reservaciones, nos da una idea de con quien estamos tratando. 



Días después, Ricardo le habló a mi esposa y tras platicar un poco más acordaron una cita, conmigo incluido. Nos citamos en un agradable club de jazz. Al principio Ricardo se mostraba tenso, no era para menos pero aún con la tensión no dejaba de observar a mi esposa en ese corto, ajustado y escotado vestido negro que lucía espectacularmente y del que me jacté de haber escogido. En varias ocasiones atrapé a Ricardo observando detenidamente los atributos de mi esposa, algo que le provocaba soltar una sonrisa nerviosa a lo que yo respondía con aprobación tratando de tranquilizarlo. Al pasar los minutos, Ricardo pudo convencerse de que todo era genuino y una vez relajado, la plática fue muy amena y poco a poco fue dándole su completa atención a mi esposa, como debía ser. Fue fácil descifrar por qué a mi esposa le agradó Ricardo: un hombre de buen ver, ingenioso, seguro de sí mismo (una vez superada la idea del cornudismo consentido) con un toque de arrogancia y que la hacía reír a carcajadas con sus ocurrencias y comentarios. 



Como suele pasar, mi esposa dio el primer paso: pegándosele y tomando la mano de Ricardo para ponerla en su pierna. Ricardo volteó inmediatamente a mí, un gesto de consentimiento de mi parte fue suficiente para que la mano de Ricardo recorriera ampliamente su pierna. Poco a poco, su mano fue explorando otros lugares de mi esposa hasta llevarla a su vagina, mientras mi esposa sobaba su miembro por encima de su pantalón. El baterista de la banda de vez en cuando dirigía su mirada a nuestra mesa, apreciando la situación con una pícara sonrisa y sin perder ritmo alguno. Las caricias y manoseos entre mi esposa y Ricardo subían de intensidad discretamente hasta llegar a los besos. Aunque me encontraba al otro lado de la mesa, era como si yo poco a poco fuera desapareciendo, cada vez era menos relevante; ser ignorado para dar cabida a sus besos y manoseos provocaba en mí un exquisito torrente de adrenalina que sólo esa singular mezcla de celos y morbo puede brindar. 

-Bueno, creo que es hora de irnos a otro lugar no creen?- Propuso mi esposa, mientras Ricardo perdía la mirada en su rostro, como hechizado por ella.

-Si amor… o tú qué opinas Ricardo?- Le cuestioné… -Estoy a sus órdenes- contestó entusiasmado.


Dejamos el club, mi esposa y Ricardo subieron atrás en el auto. En el trayecto al hotel siguieron lo que habían interrumpido en la mesa del club. Para mí era difícil mantenerme concentrado en la carretera, resistirse a las imágenes del retrovisor era prácticamente imposible. Mi esposa empezó a desajustarle el cinturón y posteriormente escuché ése singular ruido que hace un zipper en su recorrido. Después, lo único que miraba en el retrovisor era el rostro de Ricardo con los ojos cerrados, haciendo muecas con sus labios. En la siguiente luz roja, eché un vistazo directo hacia atrás para ver como la cabeza de mi esposa se movía en un controlado sube-y-baja. 



Cuando por fin llegamos a nuestro hotel de costumbre, todo estaba listo, gracias al gerente que es amigo de confianza desde nuestros días de swingers principiantes. Ya en la habitación y mientras mi esposa se alistaba en el baño, parecía que regresaban los nervios de Ricardo, pero nada que unos tragos no pudieran remediar. Platicamos un poco, logrando ganarme aún más su confianza. Cuando mi esposa salió, me guiñó el ojo y se puso delante de Ricardo, pidiéndole que la desvistiera y así lo hizo. Me llevé una de las sillas a una esquina de la habitación y me puse cómodo. Cuando mi esposa quedó desnuda frente a Ricardo, siguieron los besos y manoseos, mientras ella le regresaba el favor de desvestirlo. Mi esposa hizo que Ricardo tomara asiento en la cama y le puso sus senos en su rostro, para que se diera un festín. Después mi esposa le dio un empujón juguetón, quedando Ricardo acostado, dejando a la vista una erección plena con la cual mi esposa procedió a hacer de las suyas. La mirada que ella me lanzaba mientras lamía y chupaba el pene de Ricardo provocaba en mí todo tipo de sensaciones; siempre que tiene el miembro de otro hombre en su boca y dirige su mirada a la mía, da como resultado una conexión tremendamente excitante para ambos, es indescriptible. Ricardo estuvo a punto de venirse, por lo cual le pidió a mi esposa dejarlo comerla un poco, ella le dio el gusto. Primero acostándose boca arriba y abriendo las piernas y después Ricardo la puso a gatas para comerla por detrás, no hubo rincón que la lengua de Ricardo no explorara en mi mujer, provocándole sensuales y suaves gemidos de placer. 

Ambos en cama, procedieron a fornicar en todas las posiciones, para su placer y el mío. Para ese entonces, yo ya me masturbaba en mi pequeño rincón de la habitación pero suele ser tan intensa la experiencia de ver a mi mujer con otros que es muy difícil controlarme y sólo me masturbaba por momentos. Por lo general, mientras mi esposa coje con otros me dice cosas humillantes, algo que en lo personal me excita mucho, pero todo depende de la vibra que exista en ese momento y esa vez no fue la excepción: “Mira como me coje! el sí sabe cómo! que rico!”, “su verga esta riquísima!, la tiene grande! no como la tuya!” y por su parte, los corneadores una vez que están cómodos con la idea (porque no pasa con todos) también me dicen cosas similares: “mira como goza tu mujer conmigo! Nunca podrás darle placer como yo le doy!”, “mira lo puta que es tu mujer… mira como lo disfruta!, le encanta mi verga!”, etc. En esa ocasión no fue el caso con Ricardo pero mi mujer estaba encantada en cómo la penetraba; hay ocasiones cuando los corneadores no suelen ser lo que aparentan o están incómodos y es obvio cuando mi mujer no está siendo complacida pero aun así trata de disimularlo para hacer lo mejor de la situación, para ser cortés y complacer al corneador a quién tratamos siempre como un invitado distinguido. 



Ricardo quería durar lo más posible y fueron varias las pausas que tuvieron para que no se viniera, pero llegó el momento que no pudo aguantarse más y procedió a venirse en el rostro de mi querida a petición de ella. Después de recibir hasta la última gota de semen, mi esposa suele acostumbrar a tomarse un buen par de minutos para que yo pueda apreciar como queda cubierta de ese blanco líquido viscoso, y con Ricardo los resultados siempre son interesantes. 

Después de esa noche, las citas con Ricardo se convirtieron en algo frecuente y nunca nos quedó mal. La química que mi esposa ha desarrollado con él es tremenda, se la pasan bárbaro. Para algunas citas no soy invitado pues mi esposa prefiere salir sola con él; si lo hace porque sabe que ese toque de humillación es excitante para mí o si lo hace por otra cosa no lo sé, hay una tensión sexual muy particular entre nosotros en ese aspecto, pero el resultado es el mismo y Ricardo se ha ajustado muy bien, ha entendido perfectamente su rol como corneador y sabe lo que tiene que hacer. 

Y mientras sigo refundido en cosas de trabajo, con la temporada navideña ya puedo ver algo de luz en cuanto a un buen descanso; mientras tanto, mi esposa tiene quien le atienda, como seguramente lo hará Ricardo este viernes. 

@CornudoFeliz

A continuación tenéis los enlaces para acceder a las anteriores entradas de @CornudoFeliz pero antes, incluye tu comentario. ¿Te gustaría ser un corneador de confianza de este amigo cabrón?


Marce, me dijo mi esposa, ya has visto lo que querías ¿puedes esperar ahora fuera? me pone violenta que estés aquí

Siempre os hemos dicho que no hay que glorificar en demasía la fantasía de "cornudo consentidor y testigo de la cornada". Así como os recomendamos que jamás presionéis a vuestras esposas a que hagan algo que no quieren, también os decimos a los aspirantes a cornudos que debéis estar seguros del paso, hay que llevarlo con calma. "Ante todo, mucha calma".
En esta entrada nuestro amigo Marce nos narra en primera persona una relación que el buscó pero que luego no cumplió sus expectativas. Ahora bien, yo creo que sí leemos entre líneas no os quedará duda de que el amigo Marce volverá a repetir y seguramente hará de mamporrero. A veces las cosas no son como te las imaginas, si no mejor.
Y, por favor, no seáis tacaños con los comentarios... seguro que le ayudan mucho a Marce y a su esposa Anabel.

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Os envío mi historia sobre unos deseados cuernos consentidos, que se convirtieron en unos no deseados.
Espero vuestra opinión. Un saludo.
Marce.


Hacía más de dos años que lo estaba intentando y al fin, mi mujer accedió. Contactamos con un chico a través de este blog. 

Esa noche mi esposa iba a ponerme los cuernos. El chico llegó puntual. No me pareció bien quedar en ningún hotel y lo hicimos por la tarde en nuestra casa. 

Mi esposa ya estaba preparada, recién bañada. El chico llegó y saludó. Era muy educado. 

Sobre todo, nada de humillación ni nada de eso, ¿eh? le dije, eso sí que no me gusta.  No te preocupes me contestó tampoco me gusta mucho a mí, a no ser que me lo pidan. 

Mi esposa estaba muy nerviosa. Llevaba la braguita y el sujetador y comencé a masturbarla despacio. Poco a poco se iba calentando y el chico fue desnudándose y tocándose un poco.


Mi mujer se quitó el sujetador y cuando el chico vio como ese sostén de la talla 110 caía y las preciosas tetas de mi esposa se descubrían, tuvo una erección de caballo fue entonces cuando empezó a ponerse el preservativo. Yo, me sentí un poco raro… 

Se acercó a mi esposa y preguntó. ¿Estáis seguros, verdad? Como es la primera vez. Mi esposa no dijo nada, yo le dije que sí, que adelante. 

Le acercó la punta del capullo a su raja y se la metió muy despacio. Mi mujer suspiró. 

El chico le había metido unos 10 centímetros, más o menos, y bombeaba muy despacio mientras acariciaba a mi esposa. Ella estaba nerviosa, pero se dejaba hacer. 

El le hablaba susurrándole. ¿Estás bien? Le dijo. Sí, muy bien, le contestó Anabel. Todo entre susurros. 

Era como si yo no estuviese allí y me sentí un imbécil, pero bueno, era a lo que venía el chico, para eso le había llamado ¿no? 

El chico seguía bombeando muy suavemente y mi mujer comenzó a jadear un poco. Voy a metértela entera, le dijo el chaval a mi mujer. Ella no dijo nada y el, sin dejar de bombear, fue metiéndola un poco más hasta que le metió el rabo por completo. 

Ahora sólo la sacaba un poco, unos tres centímetros, y la volvía a meter hasta los huevos. Le estaba practicando una penetración muy profunda. Anabel comenzó a gemir. 

Al cabo de un rato, al fin se percataron de que yo seguía allí y el chico preguntó: ¿Quieres que me corra dentro, o me quito el preservativo y acabo en sus tetas? 

¡Hombre, no jodas¡ le dije yo, “córrete en el condón pero fuera de ella, a ver si se va a reventar la goma, jodemos el invento y me la dejas preñada”. Vale, vale, me dijo él. Mientras, las tetas de mi esposa se movían como flanes, arriba y abajo. Bombeó unos segundos más, sacó la polla de dentro de mi mujer, se pegó un par de sacudidas y llenó el condón. 

Mi esposa se quedó algo insatisfecha, lo noté. 

¿Qué hago con esto? me dijo. Trae, que lo tiro, y me llevé el condón a la basura. El hijo puta este saca casi el doble de leche que yo, pensé.

"Me sentía como un gilipollas"
Me quedé un rato en la cocina, sin saber qué pensar. Si os digo la verdad, la experiencia no me estaba gustando. Me sentía como un auténtico gilipollas. Me lavé las manos y torné al cuarto para despedirme del chico y decirle que ya valía por hoy. Pero joder, cuando entré, contemplé como el muy cabrón ya se estaba poniendo otro condón. 

Cariño, me dijo mi esposa, ya has visto lo que querías, ¿puedes esperar ahora fuera? Es que me siento muy violenta. Joder, y me salí del cuarto cerrando tras de mí. 



Qué mal rato, me cago en la puta. Además, no oía nada, no sé qué cojones estarían haciendo. Al cabo de unos minutos Anabel comenzó a gemir de nuevo y las embestidas del chaval se escuchaban perfectamente “plas, plas, plas, plas” ahora el muy cabrón la estaba follando a saco, como un animal. El somier chirriaba como si fuese a partirse y mi esposa rebuznaba como una burra. 

¡Me cago en la puta! me dije a mi mismo, no me he acordado de recordarle al cabrón este que se corra fuera del coño. Estuve apunto de entrar un par de veces, pero me quedé fuera, no quería quedar por más gilipollas de lo que era. 

El cabronazo pegó un par de gritos y se corrió. Mi esposa gritaba con él. Joder, seguro que se ha corrido dentro, será hijoputa. Salió y se fue al baño. Entré al cuarto y mi esposa estaba completamente despatarrada. El hijoputa había vuelto a llenar el condón. 

Salí al recibidor a despedirlo todo lo dignamente que pude. Llamadme cuando queráis, me dijo, y añadió “tu mujer es estupenda, espero haberla dejado satisfecha". Sí hombre, no te preocupes. 

Cuando volví al cuarto no sabía que decir a mí esposa y opté por: ¿Te ha follado bien? Sí, bien, me respondió Anabel. ¿Te has quedado a gusto? Tras un breve silenció, me dijo, “sí, sí… muy bien”. 

Estuvimos un minuto sin hablar y al fin le pregunté: ¿Se notaba mucho que la tenía más larga que yo? No, no me he fijado (joder, me estaba mintiendo) 

Y, ¿te ha dado mucho gusto cuando te la metía tan hondo? Bueno, normal, me contestó (Dios, no me lo dice para no herirme, se le nota) 



Nos echamos a dormir. Yo tuve que levantarme dos veces a masturbarme, pero me encontraba fatal. Pasaron unas semanas y no volvimos a hablar del tema, hasta que un día le pregunté: “Oye, ¿cuando yo estaba fuera del cuarto, el cabrón no se correría dentro de ti? A lo que me respondió, “chico, no pasa nada, llevaba preservativo”. Pensé, “me cago en la puta, le digo que no lo haga y en cuanto salí fuera el hijoputa hizo lo que le salió de los cojones”. No paro de pensar en que sí se llega a joder el condón y mi mujer se queda preñada, sería su responsabilidad por consentirlo. 

No creo que repitamos la experiencia pues sinceramente no me ha gustado nada. Os comento esta historia para que me digáis si a alguno de vosotros le ha pasado algo parecido. 

La conclusión que saqué es que vino un tío a mi casa, se metió en mi cama, le echo un par de polvazos a mi mujer, que a sus cuarenta años está buenísima, y se marchó. Y lo peor de todo es que yo le había llamado para ello. 

A veces las cosas no son como te las imaginas.

Chico de Pozuelo aspirante a cornudo busca corneador (Segunda Parte)




Con los siguientes correos de Luis Carlos (chico de Pozuelo) terminamos esta primera serie en la que nos cuenta el inicio del proceso de emputecimiento de su novia, Laura. Me pide ayuda y me ruega que le busque un corneador que crea puede satisfacer sus expectativas y, sobre todo, las de su novia. Así que ya sabéis, si queréis formar parte de la vida de esta pareja madrileña sólo tenéis que leer sus correos y si os consideráis capaces del reto escribir a corneador.toro@gmail.com


Ayer tuve ocasión de tener una charla con ellos y tengo que reconocer que la chica merece la pena aunque dudo, en un principio, que esté dispuesta a cumplir todos los objetivos de Luis Carlos. Ahora bien, por si me equivoco, les he dicho que me ofrezco de padrino para lo que venga y es que Luis Carlos sigue empeñado en que alguien preñe a su novia.

Espero seguir de cerca esta experiencia y que Luis Carlos nos envíe su testimonio para que todos vosotros, queridos lectores y lectoras, lo podáis disfrutar.



(CORREO 3)


Hola Alberto

Es fantástico leerte, leer tus consejos y aportaciones que tanto me ayudan y que, estoy seguro van a ser fundamentales para llevar este proceso a buen puerto, y puedes estar seguro que cuando llegue el momento de la primera experiencia, mi recuerdo será para tí ya que creo que tu papel va a ser muy importante en esta aventura.

Agradezco las palabras que me dedicas. Soy de la opinión de que no puede existir duda alguna antes de iniciar el emputecimiento de la pareja, y también creo que es muy importante la mentalización del consentidor y el asumir su rol y su papel, que es el de espectador de la vida sexual de su reina.

Estoy iniciando, como sabes, todo el proceso. Mi intención es comenzar a frecuentar sex shops e introducirla en la temática cornuda a través de videos, fotos, etc. También he pensado en acudir con ella de compras y comprarla minifaldas, pantalones muy muy cortos y ropa sexy en general para que así vaya aprendiendo a exhibirse y se vaya acostumbrando a ser observada con deseo. Es este un punto en el que sí necesito de tus consejos ya que opino que si conseguimos sacar de ella que empiece a gustarla exhibirse y provocar tenemos mucho conseguido y así empezaremos a sacar la puta que lleva dentro, y es que Alberto eso es algo que tengo clarísimo: lleva dentro una puta que si sabemos educarla y enseñarla, sacará plenamente. También he pensado en llevarla a un club swinger pero no sé qué te parecerá esto último. Hablamos muchísimo de sexo y, como te dije, eso está enriqueciendo nuestra relación. Me gustaría saber si debo tocar en esas conversaciones ciertos temas y si, en los momentos de pasión, debo nombrárselo.

También me gustaría que me aconsejaras que criterios seguir a la hora de elegir corneador ya que esto es algo en lo que estoy un poco perdido.

Te agradezco nuevamente tu labor

Un cordial saludo

Luis Carlos






(CORREO 4)

Hola Alberto,

Siguiendo tus indicaciones, ayer por la tarde estuvimos en un sexshop. Me llamó la atención lo suelta que fue Laura a la tienda y la familiaridad que mostraba con alguno de los productos que se exponían, especialmente las pollas de plástico que en hilera tapaban toda una pared. Al final no compramos nada pero pudimos disfrutar de cómo muchos de los hombres que circulaban por la tienda nos echaban miradas cómplices como si supieran que estábamos en pleno proceso del emputecimiento de Laura. Un señor mayor, de unos sesenta años, no nos quitaba ojo, sobre todo a Laura y eso que no iba muy provocativa, una camiseta ajustadita y una faldita vaquera corta. Tengo que reconocerte que me llevé un calentón imaginando como el viejo la metía en una de las cabinas, cerraban la puerta y la sobaba hasta hacerla correr. Me faltó valor para proponérselo pero no descarto llevar a cabo esta fantasía, ya me dirás que te parece.

Después del sexshop nos fuimos al Corte Inglés, concretamente al de Princesa. Me cuesta mucho que Laura se vaya liberando y se incline por vestir ropas provocativas. Al menos, no rechazó que fueramos a zapatería y que se probara algunos zapatos con tacones que tanto me gustan. Al lado había una pareja madura, la mujer se estaba probando zapatos y el tío no hacía más que dar vueltas, cuando vio como Laura se abría ligeramente para probarse sus zapatos se paró en seco y sin cortarse se plantó delante nuestro. Laura no era consciente y no hacía más que probarse, levantarse, mirarse en el espejo sin darse cuenta que aquel hombre no quitaba ojo. Como podrás imaginar, la faldita corta ayudaba a que cada movimiento Laura mostrase a aquel señor el triangulito de su tanga. Creo que Laura va a tener mucho éxito con los hombres maduros. La situación se cortó cuando la mujer de aquel hombre se dio cuenta de lo que hacía su marido y salieron discutiendo de allí. Laura no paró de reírse al darse cuenta de la situación. Son estas situaciones las que me confirman que Laura lleva una puta muy guarra dentro de ella. A veces pienso que Laura ya me ha coronado en más de una ocasión con unos buenos cuernos. ¿Tú qué opinas?

Salimos del Corte Inglés y nos fuimos al intercambiador de Moncloa para coger el autobús de Pozuelo. Durante todo el trayecto estuvimos hablando de todo lo que habíamos vivido. No te puedes imaginar el placer que sentía hablando con Laura de todo y comprobando como ella muestra cada vez una actitud más abierta. Noto que Laura va cogiendo más confianza y que empieza a disfrutar de estas situaciones, espero que cuando llegue el momento de que un corneador entre en nuestras vidas disfrute aún más.

Siguiendo tus consejos seguiré hablando con ella y cuando crea que sea el momento lo consultaré contigo para dar el gran paso y que un corneador cumpla con su papel en mi presencia.

Gracias por tu atención y tus consejos.

Un cordial saludo

Luis Carlos


(CORREO 5)

Hola Alberto

Perdón por el retraso. Por circunstancias no he podido escribirte antes. Hemos seguido hablando y creo que ahora es el momento de dar el paso e ir más alla. Abusando de tu confianza y siendo como eres conocedor de toda la historia te ruego me recomiendes a algún corneador que conozcas y que sea de confianza. Ya sabes que en un principio pensaba en un chico de nuestra edad pero después de leer tus consejos y experiencias me inclino por un hombre maduro, con experiencia y capaz de liderar la situación. Yo sé que me toca el papel de mirón servil, también sé que Laura una vez metida en faena estará al nivel. Estoy deseando que llegue el momento y sobre todo que después de que el corneador la haya follado bien, quedarme a solas con ella y experimentar esa situación: mi novia follada, con leche por todo su cuerpo y yo como cornudo consentidor. En ese momento sabré si Larua irá más allás en su proceso de emputecimiento o tendremos que cortar esta experiencia.

Necesito tu consejo y necesito que me recomiendes a algún corneador para que todo salga como yo quiero. A mi me encantaria contar con, al menos, un corneador de plena confianza; mi intención es verla realizar todo tipo de perversiones con cualquier hombre o grupo de hombres, pero también me gustaría que tuviera un macho corneador que ella viera como su hombre, con el que esté dispuesta a realizar cualquier práctica, incluso, con mucho tiempo, no sé si recuerdas que valoré la posibilidad de que la dejara embarazada (sí, ya sé que esto es muchísimo, pero soñar es gratis ¿no?)

Espero tu correo y te dejo mi teléfono para que me llames XXXXXXXX. Me gustaría hablar contigo para que dijeras como puedo planteárselo para que no la coja por sorpresa, para que digas si me ves lo bastante mentalizado para ser un cornudo consentidor y, lo más importante, para que me digas cuál es el corneador que has elegido.


Agradezco tu ayuda Alberto

Quedo a tu disposicion

Luis Carlos






CONTINUARÁ... SI LUIS CARLOS Y LAURA QUIEREN....








Cuernos 2.0


No es la primera vez que en este blog hablamos de Webs para contactos de amantes infieles. Ya sabéis cuál es nuestra postura al respecto, no estamos en contra pero creemos que es mucho más sencillo y honesto que esa infidelidad sea compartida y abierta. Por qué van a disfrutar sólo dos cuando pueden hacerlo tres o cuatro o… Conocemos casos de cornudos, ahora consentidores, que sufrían en silencio el emputecimiento de sus esposas y que supieron ponerle fin cuando lograron hacerse cómplices de ellas y convertirse en amigos de sus corneadores además de ser partícipes de este singular placer. Debe reinar la armonía, siempre lo diremos en este blog, y esto lo debería tener en cuenta la esposa infiel o el marido que ve próximo un posible engaño. De ahí nuestra pequeña crítica a esas páginas alcahuetas que facilitan infidelidades ocultas.

Foto de El País en el que se ve el efímero cartel de Ashley Madison. La verdad es que sólo se pudo ver en las páginas de los periódicos que informaron de la campaña ya que duró poco colgado. 
Hace pocos días un edificio en obras de la Gran Vía madrileña fue tapado por un telón publicitario. El anuncio era de la agencia de relaciones “extramatrimoniales”, Ashley Madison. ¿Por qué extramatrimoniales, no sería mejor intramatrimoniales? Así todo quedaría en casa incluso el siempre dispuesto amigo corneador.


La estrategia de la campaña era llamar la atención a través de la polémica. Usaban la imagen de Don Juan Carlos junto al príncipe Charles de Inglaterra y del recordado Bill Clinton (por cierto qué fue de Monica Lewinsky) Curiosamente, en esos días la esposa del ex presidente americano, Hillary, hacía una visita relámpago a España, desconocemos si esta visita había sido tenida en cuenta por parte de los estrategas publicitarios responsables del anuncio. El cartel preguntaba: ¿Qué tienen en común? Y a continuación cerraba el texto otra afirmación: “Nosotros no hemos inventado los cuernos”.

Todo parecía que la pretendida polémica se iba a conseguir ya que la lona publicitaria se retiró a las pocas horas de su instalación. Algunos medios se hicieron eco del hecho más por el morbo que presuntamente tienen estas páginas de contactos que por haber sido retirada con tanta rapidez. Es lógico, este tipo de anuncios polémicos para llamar la atención ya cansan y si no que se lo digan a los de la línea aérea irlandesa Ryanair.

Lo cierto es que el asunto sirvió para que se hablara otra vez de la infidelidad y se dieran a conocer algunas estadísticas que ponen de manifiesto que no hace falta ninguna campaña publicitaria para que el personal sea infiel.

El edificio desnudo de la Gran Vía en el que se colgó la lona de Ashely Madison.

Conclusiones
A parte del cansancio que ya provocan este tipo de anuncios, nos parece inadecuado que sólo se recogieran a hombres ilustres y que no apareciera ninguna mujer notable a la que se le haya relacionado en el mismo sentido con la infidelidad. Por lo tanto, no nos gustó el tufo machista del anuncio.

También nos hace dudar que hayan tenido que recurrir a la publicidad. Nos hace pensar que no tengan el tirón necesario para que la gente haga uso de este tipo de páginas. ¿Será que son poco eficaces? Yo no he visto que Google haga mucha publicidad y, sin embargo, todo el mundo hace uso de sus servicios.

En fin, que cada cual haga con su dinero lo que quiera, incluso fundírselo en una agencia de contactos para infieles que promete cuernos 2.0, no sale barato el capricho, os lo aseguro. A vosotros, queridos lectores: corneadores, cornudos consentidores y esposas/novias abiertas, ya sabéis que en este blog podéis anunciaros, contar vuestras historias y decir claramente lo que buscáis, sin coste alguno y, quizás, con mayor efectividad a la hora de apuntar el tiro del mensaje. No nos gusta echarnos flores pero el número de lectores del blog crece día a día.

Si queréis saber más del asunto, os dejamos dos enlaces:



Se me olvidaba. El anuncio de la campaña para televisión se emitió por La Sexta y Antena 3 optó por censurarlo. Tanto un hecho como el otro pasaron casi desapercibidos.


“La infidelidad, consentida o no, siempre ha acompañado al ser humano” lo dice Alicia Misrahi



Hemos tenido la oportunidad de entrevistar a Alicia Misrahi con motivo de la publicación de su último libro, “Manual de la aprendiza de depredadora”. Alicia Misrahi es una escritora y periodista barcelonesa, además de una viajera, curiosa y exploradora de las relaciones y de la psicología. En la imagen de arriba, portada de su último libro, abajo, foto de su autora.




Si perteneces o sigues a la comunidad “corneadores, cornudos, y esposas abiertas y sueltas”, www.corneador2011.blogspot.com, te gustará “Manual de la aprendiza de depredadora”, ya que critica o desmonta muchos tópicos y mitos sobre el amor que hacen mucho daño, especialmente a las mujeres; porque es divertido e invita a la reflexión y anima a experimentar nuevos estilos de vida; porque es provocador y juguetón, mordaz; porque invita a transgredir normas, especialmente las propias… Porque toda mujer debería ser una depredadora que disfruta con la caza al menos durante un mes en su vida. De esto último, las esposas abiertas y sueltas que circulan por este blog saben mucho aunque su infinita generosidad hace que lo compartan con sus cornudos maridos.

Manual de la aprendiza de depredadora. Editorial Ceac. Se puede encontrar en Fnac y en Casa del libro y en muchas librerías de las ciudades españolas.

Vamos con la entrevista.

¿Las mujeres malas son las buenas para los hombres inteligentes? Sin embargo, no siempre los hombres malos son buenos para las mujeres inteligentes.

AM. Las mujeres pícaras, inteligentes y juguetonas –no las malas- son buenas para los hombres inteligentes, los hombres inteligentes son buenos para las mujeres inteligentes, nunca “los malos” en el sentido que se le suele dar al término.


¿Qué características debe reunir una mujer depredadora?
AM. Agilidad mental, curiosidad, apertura de mente, ingenio, capacidad para afrontar que puede perder una pieza, pasión por el coqueteo, inteligencia, inteligencia emocional, capacidad de observación, paciencia para esperar, atrevimiento para arriesgar…


¿Qué ventajas encuentra la mujer depredadora?


AM. Muchas: puede salir con varios hombres a la vez y disfrutar con la mejor faceta de cada uno, puede divertirse cazando y no obsesionarse con conseguir objetivos, no tiene por qué preocuparse de si el hombre al que seduce es responsable, trabajador, quiere hijos o va en serio, no tiene que dar explicaciones a nadie y, si realmente sabe disfrutar de la cacería y de su estilo de vida, tiene una vida divertida, enriquecedora y apasionante.




En tu opinión, ¿una mujer casada o en pareja puede y debe ser depredadora?

AM. Es algo personal. Una depredadora no se caracteriza porque consigue llevar a la cama a todos los hombres que se propone, sino porque disfruta con el flirteo y la seducción. En este sentido, una mujer casada que ha pactado ser fiel puede ser una depredadora y si está en una pareja abierta, aún más porque incluso puede cobrar las piezas que le interesen.


Imagino la forma de la pieza a la que te refieres. En qué se diferencia, sí es que hay alguna, la mujer depredadora del hombre depredador.

AM. Los hombres depredadores piensan que se aprovechan de las mujeres o lo hacen, vale el ejemplo del mito de Don Juan, mientras que mis depredadoras juegan, se divierten y cazan en complicidad con los hombres.


¿Eres partidaria de la infidelidad o de las relaciones abiertas con respeto?

AM. Soy partidaria de la libertad y de que cada uno escoja su vía o su estilo de vida, aunque siempre consensuado y con respeto al otro.


Conocías las práctica “cuckold” o en español, prácticas de cornudos consentidores, corneadores/as, y esposas abiertas y sueltas. Cuál es tu opinión al respecto. Conoces algún caso real, lo has tratado en algún trabajo tuyo…

AM. No con este nombre. Pienso que la infidelidad, consentida o no, siempre ha acompañado al ser humano. En las diferentes concepciones que se ha tenido del matrimonio durante la historia -con o sin amor, concertado o escogido libremente, por conveniencia…-, buscar aventuras fuera de casa siempre ha sido especialmente atractivo. Cuando la chispa sexual y/o romántica se apaga o cuando no la ha habido nunca, es casi inevitable.


Qué te parecen las prácticas “cuckold” o, mejor dicho, relaciones a tres entre mujer abierta, esposo cornudo consentidor, y corneador o corneadora.

AM. A mí todo me parece bien, no creo ni sigo ninguna moral establecida. De todas formas, no es mi mundo.



Qué debe de hacer un esposo o novio cuando descubre que su pareja necesita algo más que él, en sexo.

AM. Lo primero, hablarlo. El gran talón de Aquiles de las parejas es la falta de comunicación.


En la historia universal podemos encontrar cornudos notables y esposas sueltas sobresalientes. Nos podrías destacar alguno/a que te llame la atención y por qué.

AM. Por ejemplo, la reina Isabel II de España, casada con Francisco de Asís, a quien apodaban Paquita porque tenía fama de ser homosexual. La reina tuvo muchos amantes, entre quienes estuvo su primer ministro, el general Serrano, y comentó sobre su noche de bodas: “¿Qué piensas de un hombre que tenía sobre su cuerpo más puntillas que yo?”. Tuvo una decena de hijos extramaritales que su marido reconoció, previo pago.

También D. H. Lawrence, autor de El amante de Lady Chatterley, quien tuvo una tormentosa relación con Frieda. Empezaron como amantes cuando ella estaba casada con un profesor de literatura y continuaron como esposos libres. Lawrence, un hombre poco sexual, alentaba a su esposa para que tuviera aventuras y soñaba con una relación triangular perfecta en la que la relación con Frieda se complementara con la amistad íntima de un hombre con el que compartiría la vida activa que le había sido negada por su salud endeble. Frieda fue amante, entre otros, de E. M. Forster y Bertrand Russell.

La relación de Lawrence y Frieda era peculiar porque él la humillaba y maltrataba, pero también hacía todas las labores del hogar y le servía el desayuno en la cama cada día.


Seguro que conoces la peli “Blade Runner” de Ridley Scott que adaptaba la novela ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? de Philip K. Dick. Para distinguir a los androides replicantes infiltrados entre los humanos les realizaban la Prueba de Voigh-Kampff. Con tu permiso te vamos a hacer algunas preguntas de un test parecido, aunque tendré que tratarte de usted.





a) Su pareja le propone hacer un trío con un hombre negro. Lo hacen. Sin avisarla su marido le come el rabo al negro. Cómo reaccionaría.

AM. Me cuesta imaginarlo, no tengo pareja. Lo que más amo es la libertad.


b) Conoce a un señor a través de facebook. Tienen una cita. Le viene a la mente la fantasía de hacerle una lluvia dorada. ¿Le cuenta la fantasía y le propone llevarla a cabo o le hace la lluvia sin avisar?

AM. Yo micciono en privado es un acto íntimo y reflexivo en el que no me gusta que haya testigos. Es un momento totalmente Zen para mí.


c) Qué opina de la lluvia dorada.

AM. Si es de mutuo acuerdo y todos los participantes lo disfrutan, ¿por qué no?


d) ¿Se considera una mujer, cien por cien, depredadora?

AM. Me considero una aprendiza de depredadora, tal como las retrato en mi libro, siempre curiosas, siempre cambiantes, siempre dispuestas a aprender y a experimentar…


e) Una buena amiga suya le comenta que su marido y ella intervienen en encuentros de parejas y orgías. Sabe que su amiga es abierta y suelta. Su amiga le propone participar en alguna de estas reuniones. Durante la sesión, el marido de su amiga se acerca a usted, delante de su amiga… Cuál sería su respuesta.

AM. Me faltan datos para responder, ¿el marido está bueno?


f) ¿Todo lo sólido se desvanece en el aire?

AM. Todo se desvanece, todo permanece. Todo fluye, todo se transforma.


Alicia, muchas gracias por habernos concedido la entrevista. Estamos seguros de que su lectura va a ser muy interesante para todos nuestros seguidores. Por último, qué te parece nuestro blog, www.corneador2011.blogspot.com

AM. Muy apropiado, informativo y excitante para las personas a las que les gustan las prácticas cuckold y muy excitante para los múltiples curiosos que seguramente atraéis.


Además de su último libro os recomendamos otros trabajos de Alicia Misrahi: Liguemos.com, Sé Mala, Todo lo que no has de hacer si buscas amor y Sexo de mujer. Historias de burdeles, prostitutas, madames y alcahuetas.



Si queréis más información sobre la autora podéis visitar su blog y su página web:

Blog, Vida,amor y sexo: http://www.amorsexovida.blogspot.com

Página web: http://www.aliciamisrahi.com







“El corneador perfecto es aquel que provoca celos y humillación en el cornudo y morbo al matrimonio” (Primera Parte)


Hemos tenido la oportunidad de entrevistar a un amigo cornudo que se encuentra al otro lado del charco. Su amplia experiencia y su claridad en las respuestas confieren a esta entrevista un alto grado de utilidad para todos los que formamos parte de esta comunidad. Os aseguro que este amigo cornudo es capaz de trasladarnos con sus respuestas a alguna de sus experiencias que a vosotros os hará empalmaros de placer y a vosotras desear estar en el lugar de su amada esposa. Para que se os haga la boca agua nos ha enviado un par de fotos de su bella mujer, aquí va el pie de foto de ambas imágenes: “Es mi esposa, pero también TU amante... Atiéndela y disfrútala, tienen mi permiso. He aquí, un cornudo consentidor”

Reconoce que el placer del cornudo aumenta en función de lo zorra que es la esposa. A más zorra, más placer. Recomienda que la esposa zorra se vista de manera provocativa para pescar a machos corneadores. Como muchos cornudos convencidos provienen de experiencias swingers y demuestra un amor platónico hacia su esposa... sobre este último dato tengo que subrayar que un auténtico cornudo consentidor debe reunir esta característica, tiene que estar muy enamorado de su esposa y considerarla una reina y procurar que ella obtenga el máximo placer.

Esta es la primera parte de la entrevista en la siguiente os daremos el decálogo que este amigo recomienda para que una experiencia esposa-zorra + corneador sea igual a cornudo consentidor y satisfecho. En breves días se publicará. VIVA MEXICO.



Qué características debe reunir la esposa de un cornudo como tú. Y me refiero, además del aspecto físico, a la forma de comportarse, de vestirse, de dirigirse al corneador, etc.

Como bien sabes, puede haber muchas variantes respecto a los arreglos que se hacen y las personalidades que una pareja asume para vivir este estilo de vida. En nuestro caso y en particular mi esposa, pues es una mujer alegre, desinhibida, con carisma y mucha seguridad. Le gusta pasarlo bien y en su rol de mujer infiel es muy coqueta y atrevida. Tiene tendencias exhibicionistas, le gusta verse bien, vestir provocativamente y siempre lucir sexy. Si ve a algún "macho corneador" en potencia, ella toma la iniciativa y trata de llamar su atención. 

Por lo general, una mirada y una sonrisa le bastan para que le hagan plática, aunque a veces tiene que ser mas persistente; mi esposa es muy guapa, muy atractiva, con una fuerte presencia y un aura de sexualidad que puede ser intimidante par algunos, se ponen nerviosos; pero de igual forma entablan una conversación y a partir de ahí viene lo demás. 

Pero, como te decía en un principio, no tiene que ser estrictamente de esta forma; por ejemplo, sé de un colega cornudo donde su esposa es algo mas reservada, no es tan atrevida y extravagante como mi esposa; sin embargo, creo que por el concepto mismo de ser cornudo, es mucho mas excitante y emocionante cuando tu esposa, tu mujer... se convierte en una verdadera zorra para tu placer... y el de ella, claro.


Cuántos amantes ha tenido tu esposa. 

Muchos, no se exactamente cuántos. Cabe mencionar que ya tenemos historia como swingers, pero desde que nos enfocamos en que yo sea un cornudo, hemos sido mas selectivos en cuanto a sus amantes; no es con cualquiera porque al ser cornudo y no swinger, tratamos que al amante se le dé un trato mas personal, mas íntimo, eso hace más electrizante la experiencia. Actualmente contamos con 3 corneadores de plena confianza que en cualquier momento dado pueden atender a mi esposa, en todos los aspectos. 

Por cuestiones de trabajo, viajo con relativa frecuencia y es bueno saber que alguien la puede "cuidar" durante mi ausencia. Como cornudo, eso le da un toque extra de emoción y excitación, por supuesto. 


Qué límites le pones a tu esposa en el sexo con los corneadores. 

Los límites los pone ella, pero en realidad no tiene, le hacen de todo, en todo y por todas partes!


Je je je... eres un auténtico cornudo y se te nota que disfrutas con ello. Esi está bien, pero, cuál es el tipo de amante que quieres para tu esposa y al que le consientes todo. 

Definitivamente aquel que comprende y tiene bien identificado lo que a uno como cornudo le excita; que en mi caso, es una mezcla de celos, morbo y humillación. No todos pueden hacerlo, pero aquel amante que sepa mezclar en correcta proporción esos tres factores sin duda se ganará un lugar especial en nuestra relación.


Cómo disfrutas más, estando presente cuando el corneador seduce a tu esposa y empieza con las caricias o besos o cuando se la está follando en tu cama. 

Que difícil pregunta! cada etapa tiene algo único y especial, definitivamente no puedo señalar algo en particular, lo disfruto todo: desde los primeros flirteos, hasta cuando tienen a mi esposa gozando de placer hasta alcanzar el éxtasis, todo es sumamente emocionante!


Has participado en alguna sesión amatoria de tu esposa con algún corneador, en la que ella te haya sugerido que le comas el rabo a su amante delante suya. ¿Has llegado incluso a juguetear con la crema del corneador? 

Mi participación en los encuentros se ha limitado solo a observar, me excita mas de esa manera, ver que mi esposa es 100% de otro; en ocasiones he estado atado a una silla mientras observo, es algo muy intenso. 

Otras veces, ella sale con su galán, y a lo largo de la cita mi esposa me habla por teléfono o me manda mensajes para ponerme al tanto de sus actividades; por ejemplo, que están en algún bar/antro, en el cine, cenando, etc. y también, por supuesto, cuando ya están gozando el uno del otro para así escuchar todos sus gemidos y gritos de placer.




Quién busca a los corneadores: tu esposa, los buscas tu entre tus amigos, los buscáis por anuncios en internet. Cómo.

Entre los dos, pero ella tiene la última palabra. No involucramos a nuestras amistades "normales" por decirlo de alguna forma porque obviamente amistades dentro del mundo swinger tenemos muchas. Cuando queremos algo nuevo, ponemos clasificados en internet o salimos a antros/clubs/bares/centros comerciales, etc. Yo mantengo distancia para que se le acerque algún galán. Aunque encontrar a un buen candidato no es tan fácil como muchos podrían pensar, hay que tener cierto cuidado y criterio a la hora de elegir, muchas han sido las veces dónde solo nos han hecho perder el tiempo y otros de plano, pues ni hablar.


Tengo que reconocerte que tu mujer es muy bella y como dices desprende una sensualidad que dan ganas de cornearla. Tienes suerte cabrón de tener a una esposa como la que tienes. Además, es necesario que la mujer también recurra a su provocación para facilitar el tránsito del corneador. Qué experiencia cuckold de tu mujer te ha satisfecho más. 

Uff! Han sido muchas y conforme pasa el tiempo mi esposa adopta con mas descaro su rol de mujer de cornudo y cada vez las experiencias son mas intensas. Por mencionarte un encuentro reciente, donde fui el chofer de mi esposa y su galán en turno. Desde que fuimos por el a su departamento inmediatamente mi mujer ya no se le despegó. Se lleva muy bien con ese corneador en particular, tienen una química tremenda y eso alimenta un poco mas los celos y por ende mi excitación. Después los llevé a bailar, verlos como pareja fue muy emocionante. Durante toda la noche yo mantuve mi distancia en otra mesa, aparte de chofer fui un simple obervador. Pero lo que me gustó mucho fue que ya en el hotel y después de verlos tener una ardiente y apasionada sesión de sexo, se encerraron en el baño y se bañaron juntos; al principio solo escuchaba risas algo perdidas entre el ruido de la regadera, y después gemidos. Intenté varias veces entrar, pero le pusieron seguro a la puerta y eso fue un toque genial de mi esposa. Cuando por fin salieron, después de haberlo hecho por segunda vez en la regadera, me trataron como a un vil chismoso que nada tenía que hacer en la habitación. 

Me sentí como un auténtico cornudo perdedor, y fue sensacional. Ya de regreso en casa, mi esposa y yo hicimos el amor como locos; momentos antes ella había sido de otro y recordar todo lo que pasó nos puso a mil por hora! fue riquísimo.


Desde luego si que la experiencia fue excitante, por cierto me gusta el término “regadera” para la ducha, jejejejeje, la higiene ante todo. A mediados de los 80 en Madrid había un disco pub que se llamaba Regadera, recuerdo a su portero manco y especialmente a dos jóvenes amigas españolas que tuve el placer de cornear.... qué tiempos aquellos. ¿Quieres añadir algo más?

Claro!.. un cálido saludo para tí y tus lectores! Espero que a través de tu blog se aclaren muchas dudas que puedan tener todos esos cornudos actuales y potenciales, que se sepa que con la mentalidad y los cuidados adecuados, es -sin duda alguna- un estilo de vida lleno de emociones, adrenalina y de plena satisfacción sexual.

Gracias @CornudoFeliz y gracias por tu decálogo para que una relación corneador + esposa/zorra = cornudo feliz, funcione y que en breve publicaremos en el blog, corneador2011.blogspot.com y VIVA MEXICO.

Muchas gracias a tí por la invitación, espero que mi aportación ayude en algo... saludos!

ATENCIÓN, ATENCIÓN, no te pierdas el previo a esta entrada, "10 Consejos para sacar de tu mujer la zorra que lleva dentro y para que tú puedas disfrutar del placer de ser un cornudo consentidor (cuckold)"




Alberto Toro


("UA-21720468-1")